La Cruz de Cuello de la Compañía de Loyola es una condecoración Pro Merito Ignaciano
Se otorga en reconocimiento de las actividades que hayan aportado honor y prestigio a la Soberana Compañía Militar.
Se concede principalmente a los que no sean miembros de la Compañía.
Esta condecoración se impone independientemente de la religión profesada, por lo tanto aquellos que la reciben no pasan a ser miembros de la Compañía ni del Cuerpo Socorro Argentino "Tcnl D José María Rojas Argerich".
La condecoración pro Merito Ignaciano es concedida tanto por Decreto del Soberano Consejo, y como, motu propio, por el Excmo Señor General de la Compañía y Comandante del Cuerpo Socorro Argentino. Los merecedores deben ser voluntarios, que sin fines de lucro, ni estando obligado a ello, realiza un trabajo o servicio, destinado a la asistencia y/promoción de una actividad.
Los miembros de la Compañía deberán haber sido aceptados como activos (contar con dos años de antigüedad en calidad Caballero/Dama adherente o colaborador voluntario Art 5° Estatuto).
Portando mandatoriamente la Venera, en los Actos, Seminarios, Jornadas y cualquier otro evento Cultural, Religioso, destacando así el espíritu de pertenencia a la orden Militar de Caballería.
Portando mandatoriamente la Venera, en los Actos, Seminarios, Jornadas y cualquier otro evento Cultural, Religioso, destacando así el espíritu de pertenencia a la orden Militar de Caballería.
Fue creada por el General de la Compañía y Comandante del Cuerpo Socorro Argentino Cte Pr Pofesor Académico Dr D Carlos Gustavo Lavado Ruíz y Roqué Lascano Ph.D el 23 de octubre de 2008, como una cruz memorial de la creación de la Compañía, y del Cuerpo Socorro Argentino dependiente. Es por lo tanto, considerada como una “Cruz de Honor” como recompensa por una especial devoción a prcurar el bien de las personas de manera desinterasada, incluso a costa del interés propio.
La medalla pende de una cinta con los colores blanco y amarillo.
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