Dr Norberto Padilla
Norberto Padilla
amaba profundamente a la Iglesia. La cercanía eclesial que hoy recibo del Papa Francisco es la que con Norberto hemos experimentado siempre, cuando era Arzobispo de Buenos Aires y cuando ya elegido Papa, lo hemos seguido a la distancia, y rezando, en cada oportunidad por él, como siempre lo pedía. Particularmente, en los dos primeros meses de cuarentena obligatoria en Argentina, antes de su operación, hemos disfrutado con gratitud, juntos, presenciando, en forma virtual, la misa diaria del Vaticano y otros momentos fuertes de oración. Nuestro deseo de visitarlo, alguna vez, se vió realizado, en cierta forma, cuando nuestras dos hijas religiosas de Jesús María, participando del Capítulo General de la congregación, tuvieron la oportunidad de presenciar una Audiencia y hacerle llegar nuestro saludo. Esta carta se suma a tanto cariño recibido y a tantos mensajes que expresan la bondad, la alegría y la sonrisa de Norberto, que hoy consuelan nuestro dolor, y me dan mucha paz.
Dando gracias por nuestra Iglesia con rostro de madre, sigamos rezando por nuestro Pastor.
Don Carlos María Padilla Roqué
Doña Alicia Nelson Padilla Roqué de Zurueta
Doña Justa Roqué de Padilla
Dr Don Carlos Lascano Padilla
Cte Pr Don Carlos Gustavo Lavado Ruíz y Roqué Lascano